domingo, 10 de abril de 2011

Clara

El dominio personal, es decir el arte de conocer lo que queremos y caminar hacia ello, muchas veces se ve nublado por nuestros modelos mentales. Hay mensajes interiores, en forma de creencias que no nos permiten avanzar, siendo muchas veces desconocidos conscientemente.
La amiga Clara, hace honor al valor "claridad", que muchas personas, siendo uno de sus prioritarios, lo sufren por estar bajo mínimos! Me explico, si tu valor "claridad" es uno de 5 los primeros y no te sientes suficientemente "en forma" con él, lo pasas mal, no disfrutas y te "atascas".
¿Cuántas veces te sorprende que hay ciertos asuntos que se te hacen una inmensa montaña y otros mucho más complicados los desenvuelves con sólo ocuparte de ellos? Te habrá llamado la atención.
Imagina que uno de tus valores es "familia", es decir, la familia es algo muy importante para ti, sin la que te ves sol@, sin energía,...cojeas. En este valor, hay ciertas "rutinas defensivas" o conflictos que no has saneado: perdonado (al familiar/es o a ti), por lo tanto, todo intento o avance es infructuoso, puesto que sigues viendo a la persona con los ojos anteriores, ya conduciendo al conflicto, sin permitir oportunidad en la conciliación. Se parece a una actitud de juicio, crítica o llena de supuestos: "seguro que si le digo esto, dirá lo otro"...directamente tu propia energía provoca esa reacción. Por lo tanto tu creencia de "imposible" coge más fuerza y no ves salida a la reconciliación.
Esta postura, desequilibra el resto de roles, en mayor o menor intensidad, pues te interrumpe en tu propósito de alcanzar deseos, sueños. No te permite enfocarte y fluir, es como un estorbo que está ahí constantemente, hagas lo que hagas, va molestando e interfiriendo en tu capacidad de emprender, innovar y ser feliz.
Pongo un ejemplo de que sintieras bloqueo en tu "rol profesional". Quizás hayan cosas que te gustaría hacer, en las que te sentaría bien ejercer, seguir creciendo en esta faceta. No lo entiendes, porque todo tu entorno te ve capaz, es más, lo inicias, lo intentas y parece que funciona, que haces fácil en apenas meses lo que otros tardan años...¿qué sucede? ¿por qué se rompe? 
Desde luego que hay muchos ingredientes en cada caso en particular, siempre se simplifica si revisas que tus valores estén bien atendidos. En el ejemplo que te muestro, puede suceder que haya cierta tendencia que te gustaría probar, pero que se parezca a algo de lo que hasta ahora, por haber utilizado tu tiempo en ir en contra de todo aquello que se pareciese a lo que tu familia quería que hicieses, tanto en profesión, como en comportamiento, horarios, etc. Te has entrenado durante tanto tiempo en ocuparte de qué podías hacer que molestase a los otros, nutriendo tu "venganza" hacia lo que ellos querían, que ya no eres consciente que la única persona que se está dañando eres tú mism@. En mentes adolescentes, en las que predomina la psicología inversa, osea que si me dices verde, yo rojo; es una práctica bastante habitual. 
¿Qué hacer? Bueno, supongo que estarás de acuerdo que utilizar una mentalidad más adulta, en la que tomas las decisiones que te benefician, al tiempo que no pones en peligro tus valores, es decir, bascularizar, poner en la báscula aquellas profesiones en las que te gustaría emprender tu nuevo camino, sin obstacularizarte y prohibirte (por ser ya un hábito) actuar como realmente deseas, no como un luchador atemporal inconsciente.
Mirar con ojos renovados, desde una actitud tolerante, donde entiendes que tu camino lo diriges tú, que nada ni nadie es responsable de tus pasos, que tan sólo te has de permitir crecer, viendo a las personas en sus riquezas y dejar de lado sus mermas. 
¿Cómo te sentirías si utilizaras toda tu energía e ilusión sin obstáculos enfocados a resentimientos? ¿Te imaginas todo tu pensamiento dirigido hacia lo que realmente quieres, sin más?
Da lo mismo lo que ellos piensen, pues no puedes vincular tu felicidad en que todo suceda o todo el mundo piense como a ti te gustaría, eso son excusas que te sirven de obstáculo hacia tus deseos. Posiciona tu pensamiento en construcción, en crear esa realidad que deseas que suceda. ¿Verdad que cuando quieres ir elegante, te vistes, comportas y piensas elegante??? Así de sencillo podría ser alcanzar aquello que deseas, sobre todo ser "fan" de Clara, la claridad que necesitas en esos momentos bajos.
Un abrazo :-)

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