sábado, 31 de marzo de 2012

Vive la vida

Os deseo un feliz fin de semana con un entrañable poema hablado de Mario Benedetti: "No te rindas". Es tierno y amoroso. Armónico y sensible.
Como es cortito,...sabe a poco, sin embargo lo puedes ver y escuchar y luego cerrar los ojos y volver a escuchar, las veces que desees, pues la voz tiene esa fuerza que te persuade de la resistencia a dejarte llevar.




Son dosis del potenciador universal: ¡el amor! Ese amor consciente que maneja todas las células de tu cuerpo, reconstruye el flujo neuronal y equilibra los momentos en que nos rendimos lejos de nuestro bienestar, esos en los que baja nuestro estado anímico y parece que nos cueste respirar, sencillamente nos olvidamos y nos alejamos de nosotros mismos. 
¿Te duele cuanto un amig@ o una persona querida se aleja de ti? Tal vez así lo veas más sencillo que entender que cada vez que te alejas de ti, de alguna manera enfermas y lo pasas mal.
Entrenamiento: ¿Cómo te sentaría decirte cada día 10 elogios? Esto es como el anuncio del plátano! necesario para tu energía diaria :-)
Si lo pruebas, con espejo o sin él, y te apetece, nos lo cuentas y lo compartimos.

miércoles, 28 de marzo de 2012

Crea tu plan de acción

Te presento un vídeo que rescatará de ti alguna sonrisa. Es ese momentito del día que te dejas llevar y relajas tu mente, al menos en el plano consciente.
Verás clara la diferencia entre tenaz y tozudo. También la perseverancia y constancia en algo que el protagonista, en este caso el cerdito, desea conseguir: su galleta.




¿Has pensado por qué tanta insistencia? Fácil, su motivación! Le ha llegado el aroma del tarro de galletas y tiene ese sentido, el del olfato, muy activo.  
Después de todo, eso es lo que nos echa atrás de nuestros deseos y objetivos, la falta de motivación o el no saber cómo ir alimentándola. Sencillamente creemos que el deseo desaparece, siendo la motivación la que no sigue en un nivel suficiente como para sostener la consecución de nuestros actos y conseguir nuestro propósito.
La recompensa es frustración, malestar y bajada de energía (pariente de la depresión). Incluso puede aparecer algún que otro "no valgo", "no consigo...", "no merezco...". Esto es como premio doble: además de no conseguir lo que deseamos, nos auto-castigamos y creamos una creencia limitadora que cada vez nos dificulta más el aventurarnos, si quiera, a tener ciertos deseos. (ya creemos que no podemos -de ahí el término creencia limitadora-).
En este caso, el deseo del cerdito es comerse las galletas. Está claro que es un final inacabado, pues sólo ha de dar un golpe al cristal y conseguir su objetivo. (dejemos que tome aliento!)
Lo primero a observar es que tenía 1 objetivo claro: comer galletas. 
Su plan de acción es conseguir llegar hasta el tarro.
El momento es "ya". Y las acciones propuestas van surgiendo a medida que la anterior se le resiste.
Esto es tenacidad. Han habido la tira de obstáculos, sin embargo no ha cesado en su cometido, sabía lo que quería y lo veía a su alcance.
Tozudez habría sido el empezar a pelearse con los obstáculos, de manera que le hubieran alejado de su objetivo.
Su motivación no ha cesado en todo el tiempo, ha utilizado imaginación, pero sobre todo acción!.
Este es un ejemplo que puedes extrapolar a tu vida, para conseguir aquello que desees.

Esto es lo que un coach te ayuda a conseguir, diluyendo las creencias limitadoras, cosechadas por experiencias pasadas, que ya no te facilitan, sino que te alejan y dificultan de tu bienestar, satisfacción y realización personal.
¿Has observado algún patrón, de desmotivación o de conseguir, en tu vivencia? Estupendo, ahora te será más fácil! 
Te invito a que la compartas y seguimos creciendo :-)

jueves, 22 de marzo de 2012

Coaching, potenciador de voluntad

Sin duda, cuando vemos o nos explican sucesos como los que se ven en este vídeo, sucede en nuestra conciencia esa sorpresa por la habilidad humana.
Todo es entrenamiento, fijaos en la destreza que muestra con sus pies, como nosotros la tendríamos con nuestras manos. Llega un momento en que has de recordar que lo que maneja con tanta soltura son sus pies!



El coaching, siendo una metodología que promueve la acción, potencia ciertos valores inherentes al ser humano, como conseguir aquella satisfacción que te lleve a tu realización.
Muchas veces nos acomodamos en dar vueltas y vueltas al pensamiento, tan es así que nos paralizamos y vamos postergando, incluso nos encerramos en un cúmulo de "no puedo". 
Te invito a que, cuando tengas esa sensación, cojas aire, pongas una sonrisa en tu faz y lo intentes, pero con la convicción de que sí puedes. ¿Por qué no?
Profundizando en el mensaje de este vídeo, podemos observar que esta señora, para llegar a tal destreza y manejo, ha repetido las mismas acciones una y otra vez. Lo mismo que vemos en bailarines, artistas de la pintura, profesionales en el despiece de carnes y pescados... Estamos hablando de habilidad, de dominio de una técnica o de una disciplina a base de su repetición, que no es más que un entrenamiento consciente, con su dosis de voluntad y esfuerzo. Llega un momento en que esa tarea se traslada al inconsciente y ya no supone tal nivel de esfuerzo, es cuando hacemos las cosas mecánicamente. ¿Recuerdas cuando aprendiste a conducir? Al principio tal coordinación parecía a cámara lenta. Ahora nos permitimos tener conversaciones y otros detalles que mejor reservo!
Lo mismo sucede cuando iniciamos el aprendizaje de un idioma, tocar un instrumento musical, coger el pincel en un lienzo blanco. Observa a un bebé cómo intenta llevar la cuchara a su boca, al principio no acierta el lugar justo de su boca, ni el equilibrio de la cuchara-mano-brazo. Con suerte le llega una cuarta parte de la papilla y el resto lo disfruta nuestra mascota, su ropa y todo lo que está a un metro de distancia :-)
Esa traslación es la que propone el coaching, como lo indica Tim Gallwey en su libro "El juego interior del tenis", donde divide al "Yo" en 2: el que dirige la acción y el que la realiza. Muchas veces no somos conscientes de la de cosas que llegamos a hacer en un momento cualquiera de nuestra vida. El simple hecho de respirar conlleva una correlación de acciones que ya no nos suponen un esfuerzo (en un nivel respetable de salud), no estamos dando a nuestro cerebro conscientemente la orden constante de que inspire y expire, lo hemos automatizado. Imagina cuando escribes, cuando caminas, cuando comes...
Esta mañana, en la sesión de coaching grupal semanal, ha habido una de las participantes que ha comentado, desde sí misma, la sorpresa de todo cuanto había hecho y cambiado. Le parecía increíble, dentro de las condiciones y dificultades con las que, justamente afrontaba, en esos momentos de su vida, el haber llegado a realizar y conseguir.
¿Qué tal si te propones una pequeña acción, algo que no te has permitido aún y lo experimentas? Tal vez te sorprendas!
Tal vez con tu acción de contárnoslo animes a que otros lo intenten! Probar aumenta tu experiencia.

lunes, 5 de marzo de 2012

Ficción emocional



Os comparto esta metáfora que me ha llegado de una buena amiga y a continuación os la comento.


LA RANA SORDA...
 
Un grupo de ranas viajaba por el bosque y, de repente, dos de ellas cayeron en un hoyo profundo. Todas las demás ranas se reunieron alrededor del hoyo.
 
Cuando vieron cuan hondo era el hoyo, le dijeron a las dos ranas en el fondo que para efectos prácticos, se debían dar por muertas.
Las dos ranas no hicieron caso a los comentarios de sus amigas y siguieron tratando de saltar fuera del hoyo con todas sus fuerzas.
Las otras seguían insistiendo que sus esfuerzos serían inútiles.
Finalmente, una de las ranas puso atención a lo que las demás decían y se rindió. Ella se desplomó y murió.
La otra rana continuó saltando tan fuerte como le era posible.
Una vez más, la multitud de ranas le gritaba y le hacían señas para que dejara de sufrir y que simplemente se dispusiera a morir, ya que no tenía caso seguir luchando.
Pero la rana saltó cada vez con más fuerzas hasta que finalmente logró salir del hoyo.
Cuando salió, las otras ranas le dijeron:"nos da gusto que hayas logrado salir, a pesar de lo que te gritábamos".
La rana les explicó que era sorda, y que pensó que las demás la estaban animando a esforzarse más y salir del hoyo.
 
Moraleja
1. La palabra tiene poder de vida y muerte. Una palabra de aliento a alguien que se siente desanimado puede ayudar a levantarlo y finalizar el día.
2. Una palabra destructiva dicha a alguien que se encuentre desanimado puede ser lo que lo acabe por destruir. Tengamos cuidado con lo que decimos.
3. Una persona especial es la que se da tiempo para animar a otros.
 
Una referencia relacionada:
En los Estados Unidos de Norteamérica, en la NASA, hay un poster muy lindo de una abeja, el cual dice así:
"Aerodinámicamente, el cuerpo de una abeja no está hecho para volar; lo bueno es que la abeja no lo sabe"
 ¿Qué os parece si hacemos oídos sordos a las cosas negativas y comenzamos a animarnos todos para que nos vaya mejor?


Muchas veces damos más poder al miedo, a las emociones negativas, que a nuestra fuerza interior. Escuchamos el consejo de otros, nos rendimos a su propuesta, pero se trata de aquello que nosotros mismos estamos proyectando de nuestra interpretación. En la metáfora de la rana, la que sigue luchando interpretaba ánimos y aliento, por lo tanto siguió tenaz hasta conseguirlo, sacó fuerzas desde la creencia de que si las otras creían que ella podría. ¿Por qué no intentarlo?, después de todo, rendirse es abandonar la vida, no al revés. La vida está siempre a nuestro lado, nacemos con ella, sonreímos, disfrutamos, experimentamos y también sufrimos. Pero siempre está ahí, aún cuando estamos insoportables y negados a toda gratitud, humildad o belleza
Todo nuestro tiempo, aún bajo los efectos de una anestesia, nuestra mente está en funcionamiento. Muchas veces desconocemos qué anda por ahí, sin embargo, las emociones nos dan una pista (rabia, alegría, tristeza, miedo). Todo lo que se aleje de alegría no es vital ni agradable, detiene nuestro crecimiento celular y desequilibra nuestro estado anímico. Cuando proyectamos buenas vibraciones, mediante pensamientos, imágenes que instalamos en nuestra mente con una gran sonrisa, humor, amor, palabras bonitas hacia nosotros o nuestro entorno, sucede la mejor de las medicinas: nos encontramos serenos, plácidos y toda acción genera un estado satisfactorio y fluido; parece que todo sea fácil.
La vida la ficcionamos según la forma en la que la interpretamos, es decir, podemos mejorarla si eso vemos que no nos trae felicidad. Si clasificamos en 3 opciones generalizadas: humor, drama o ensayo, ¿dónde verías más tu tendencia habitual? ¿Te has fijado en la actitud de algunas personas que siempre es trágica, suceda lo que suceda? Sin embargo, ¿otras que parece que todo sea suavizado y alegre, que a pesar de las circunstancias siempre están enteras, siempre están ahí? ¿Otras que siempre le buscan los tres pies al gato, con actitud de queja?
¿En cual de las 3 opciones situarías tu interpretación habitual de la vida, es decir, tu comportamiento más repetitivo ante las situaciones y tu estado anímico?