Oficina 2.0

"Oficina 2.0_la clau és la metodologia
Horari: 17/02/2011 a les 17:30:00
Durada: 2:00.
Lloc: Convent St. Agustí Plaça Pons i Clerch 2, cantonada Comerç Barcelona 08003.
Activitats per als emprenedors"

De esta actividad, la mayoría hemos salido "tocadas las 20 pm". Seguramente los que no se han quedado a la mesa redonda habrá sido por prioridades, pues el ambiente que han conseguido plasmar los ponentes y también algunos asistentes, con sus intervenciones, han dotado de una frescura y eficacia que invitaba a superar el horario previsto.
Cada vez nos damos más cuenta de que la sociedad cambia, por lo tanto, el sistema se ha de adaptar a dicho cambio. Desde los distintos organismos de las diversas regiones, se propician mini-cursos, cápsulas, networkings y conferencias en las que la principal intención es el facilitar las herramientas que la actualidad requiere.
Hablando de las TIC y redes sociales, se ha coincidido en la velocidad y giro que han tenido desde su inicio. De la conveniencia de usar unas u otras para depende qué intención y/o sector emprendedor, así como de relaciones sociales laborales o personales.

El cambio ha sido el protagonista. Había quienes apostaban por la doble identidad en facebook: una más empresarial y otra para lo personal. Otros de la mejor afinidad por usar LinkedIn, otros por verse atraídos por twitter, por su poder de abstracción y afluencia de posts. A otros, tanta información desde internet les abrumaba.
Los ponentes han comentado su caso personal, aquél que les ha llevado a experimentar con los recursos de la nube de google, con organizadores virtuales, con páginas de inicio personalizadas, blogosfera, especialistas en colgar en la web presentaciones, vídeos, etc. La mayoría eran gratuitos, habían otros que su precio era muy simbólico y otros que incluso apostaban por proyectos. Aprendizaje adaptativo. Como comentario de mesa redonda, se ha observado la postura que se adopta últimamente con los marcadores sociales, que ofrecen más facilidad de "comunicación en un clic", sin embargo se veían mermados los comentarios. Esto ha sido compensado con los grupos sociales, dentro de las redes, en los que los debates que allí se experimentaban culminaban en un aprendizaje activo.
Otro de los cambios allí comentados era la distribución horaria. Muchos hablaban de la no diferenciación entre el tiempo laboral y el personal y/o de relaciones sociales. Es algo que sale de los cánones rígidos y de los sentimientos de "horario cambiado lunar". En el mundo 2.0 todos los horarios tienen cabida y son productivos. Eso ya no supone una limitación, todo lo contrario hay plena apertura de oportunidades y tendencias innatas de mayor productividad. Mayor libertad.

Otro cambio muy esperanzador, y ya practicado, es el antiguo "trueque". Muchos profesionales ofrecían su producto o servicio a cambio de otro en el que no estuvieran con tanta disponibilidad y/o experiencia, lo cual creaba un equilibrio del patrón penelista "ganar-ganar". En la misma línea, muchos profesionales, ocupaban parte de su tiempo extra-laboral a compartir conocimientos e intervenir en obras sociales, tanto presenciales como virtuales. El resultado era de dar-recibir, pues en esos actos seguían aprendiendo y se daban a conocer, sin estar en su ánimo una vertiente comercial, sin embargo, quizás esa postura ofrecía más apertura a valorar aún más su profesionalidad y posibilidades. Se apostaba por la especialización desde cada profesional, sin necesidad de titulaciones. Muchos profesionales eran muy buenos en su labor por estar trabajando en contacto con su talento. Quizás sin haber recibido formación, pero sí experimentado e innovado lo existente. Se ha coincidido en el reconocimiento de este valor añadido, había administrativas que tenían más conocimientos que diplomados en la materia, que enseñaban y trasladaban desde su real experiencia, sin teorías.
El contacto humano, el aporte desde cada cual, la ilusión por estar presente y vivir todos los cambios que se generan día a día, ha sido una realidad en esta actividad compartida. El acto ha concluido con unos slogans desde los ponentes, como "frase que os ofrecemos", siendo la última, desde una de las asistentes "no tengáis miedo".
Tengo la sensación de que la mayoría nos hemos llevado un buen sabor de boca. En ningún momento ha surgido la crítica social ni la queja. Todos adoptábamos una actitud responsable de la construcción, desde cada uno, de una mejora y creatividad en pro de la sociedad que todos queremos y, por lo tanto intervenimos, pues somos parte.