sábado, 30 de marzo de 2013

Tu respiración, tu actitud

Foto Google. Respirando armonía.
¿Estás presente en ti, o te vas desplazando por la vida y por tus emociones?
El dominio de uno mismo es el arte de conocerse, de dominar el pincel o la pluma, en el pintor o escritor.
Imagina cuánto puedes hacer sabiendo de ti mismo, fortaleciéndote y armonizando tu energía. Aportando y recibiendo,...siendo tú.
Te das cuenta de cuántas veces sabemos más de nuestros amigos que de nosotros mismos, con tan sólo escucharlos, mirarlos, estar por ellos...Incluso a veces hacemos sonar el teléfono y acertamos el momento para compartir con ellos y viceversa. ¿Te suena?
Mi propuesta es que pares unos momentos cada día para estar contigo. Como si fueses tu amig@. Parece interesante!
Foto Google. Me siento.
Tu postura ante la vida es el espejo y la vibración que ofreces: rechazo, atracción, tristeza, encanto... Vamos a sacar provecho.
¿Te has dado cuenta cuando, sin pretensión de analizar, te cruzas con personas y te llega información sobre su actitud, por su morfología, sus gestos, su pose, su manera de caminar, de encorvarse o de ir rígida?
Foto Google. ¿Qué te sugiere?

Foto Google. ¿Y esta foto?

Foto Google. ¿Y esta otra?


Foto Google. ¿Y ésta?
Tal y como pensamos la vida, y pensamos de nosotros, lo exteriorizamos y vivimos. Es posible manejarlo y cambiar, desde estos gestos posturales, para sentirnos mejor, para comunicar y comunicarnos mejor. Con "mejor" no me refiero a cánones y normativas, sino a "sentirnos", experimentar desde una actitud más abierta, flexible, fluida y tónica. Seguro que alguna vez te has propuesto pasar un día "redondo" y has invertido en vestirte, maquillarte, ir a la peluquería...para poder sentirte más segur@, elevar tu estado de ánimo. Esto es lo que propone Bruce Lee con "Be water my friend"

Como profesional, tanto del coaching, como desde mi recorrido comercial y empresarial, así como persona, esto lo llevo experimentando desde muchos años atrás. Sin abrir la boca, ya comunicamos, también sin movernos ni con expresiones físicas o faciales (aquellas ocasiones en las que no queremos mostrarnos e intentamos poner un gesto neutro, que no nos delate). La inteligencia física nos informa de nosotros y de los demás en un modo binario, no se complica como la inteligencia racional o lógica, es más sencilla e intuitiva. Sencillamente recibe unos imputs, que nosotros traducimos desde nuestros propios modelos mentales (valores y creencias) o, como dice la PNL (Programación Neurolingüística), desde nuestro propio mapa.
Distintas técnicas, con las que he conectado, como la grafopsicología (trasladada a tu gesto corporal y facial); la Morfopsicología; el coaching desde el estudio de las edades de la mentalidad; el lifemanagement y las estructuras de nuestro pack de serie de inteligencias (física, emocional, intuitiva, social), con las que ya venimos indumentados; The Human Design (El diseño humano) y otras, conducen a un mejor auto conocimiento así como conocer y entender mejor a los demás. La utilidad y ventaja está en que, tal y como se indica en la neuropsicología, la plasticidad de nuestra mente es algo más que probado: podemos entrenar nuestros pensamientos con el fin de superar a diario los  distintos conflictos o bien modelarlos de forma constructiva, positiva en pro de nuestros deseos, sueños y objetivos.
Ser responsables de nuestra vida, alejarnos de las tendencias víricas de la crítica y el enjuiciamiento, soltar nuestra parte victimista que tiende a trasladar culpas a situaciones y a otras personas, es nuestra labor, es lo que nos conduce a ese tren de la felicidad, construida a nuestro paso y necesidades. Cuando nos enfocamos en lo que realmente queremos, no el vecino o nuestros amigos, etc., estamos cultivando nuestro presente y sembrando nuestro futuro. Ahí no caben las negaciones "no puedo", pues todo lo que proyectamos está fundamentado en el deseo y la voluntad de un amplio campo de posibilidades.

Foto Google. El tren de la felicidad, donde hacemos realidad nuestros sueños.
¿Cómo realizar estos cambios sin decepcionarnos en el intento?
Todo hábito se entrena con 21 días seguidos de realizar la misma acción. Son días de entrenamiento en el nuevo propósito, sin dejarnos ni un sólo día, o volvemos a empezar. Luego, a los 40 días, ya forma parte de nuestro hábito, se automatiza. Se trata de pasar la tarea al subconsciente, no hacer constantemente el esfuerzo con nuestra mente consciente, quien requiere de mucha energía de centrarnos en algo concreto, cuando estamos en "modo multi-tarea". Esto lo hemos podido experimentar cuando hemos aprendido a conducir, a escribir a máquina o con el ordenador sin mirar al teclado, con la forma en que integramos un idioma o con algún tipo de ejercicio. En un inicio hemos tenido que esforzarnos, luego ya sale automático.

Una técnica que sabemos que influye mucho en nuestro día y que, últimamente parece que nos venga más a la conciencia, dado los estados habituales de estrés, ansiedad, falta de concentración, etc. es la de la respiración y la postura que adoptamos. Nos la muestra, desde la sencillez y sentido común, la experta Maria Angels Farreny, como entrenadora de respiración y meditación. Mari Angels, nos enseña cómo re-educar el ritmo respiratorio, la postura corporal y la conciencia del estar vivo. Tuve el placer de conocerla la semana pasada en persona y experimentar su técnica. No me sorprende la fecha en que nos conocimos (21 de marzo) ¡no hay casualidades!!!!. El encuentro fue posible gracias al patrocinio de AFAEMME, donde desde la red "Nosaltres empresàries" promovió un networking con taller y comida incluidos. Podéis ampliar más información si clicáis sobre los nombres.

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